jueves, 29 de noviembre de 2012

Dilema de Epiucro, para filosofía.

El dilema de Epicuro afirma que: Si Dios es todopoderoso y benevolente: puede y quiere acabar con el mal. Si Dios es benevolente: quiere acabar con el mal. Si Dios es todopoderoso: puede acabar con el mal. He aquí el dilema: el mal sí existe. Entonces si Dios puede acabar con el mal y no lo hace, es que no es benevolente. Si, por otra parte, Dios quiere acabar con el mal y no lo hace, entonces no es omnipotente. Lo único que demuestra esto es que, o bien, Dios es malvado; o que los poderes de Dios están limitados o que a Dios no le importa nuestro sufrimiento. Mi opinión tal vez no sea del todo objetiva, ya que soy ateo, pero trataré de exponerla lo más objetivamente posible. Por lo general, la mayoría de los cristianos solo acuden a Dios cuando las cosas se tuercen, cuando algo empieza a ir realmente mal. En los buenos momentos, solo los más devotos que dan gracias a su felicidad a Dios se acuerdan de este. Yo, simplemente, no creo que exista un ente superior a nosotros que diese origen a todo. Como bien dice el libro de "Luces y Sombras", el cristianismo aparece en un maremagnum de creencias emergentes. Religiones que trataban de imponerse y de dar un sentido coherente a la vida y a lo que hay después de ella. Por ello, pienso que el cristianismo solo fue una más, una religión más que tuvo la gran suerte de aparecer y penetrar en las mentes de los individuos. No lo hizo instantáneamente, como es obvio, pero con el paso del tiempo esta caló y su número de seguidores empezó a crecer considerablemente. A parte de eso, ¿por qué tendría que ser el cristianismo la religión verdadera?¿Por qué no el islam?¿Por qué no el budismo? Yo pienso que la religión a la que se pertenece depende del país en el que se haya nacido. ¿Es entonces la religión algo libre o algo a lo que nacemos atados? Obviamente, depende. Por suerte, en Occidente existe la opción de dejar de seguir la religión principal en tu país, pero este no es el caso de Oriente. Si naces en Arabia Saudí, esta posibilidad ni se te pasaría por la cabeza. Si naces musulmán, morirás musulmán. Tristemente, en estos lugares el ateísmo está castigado con la pena de muerte. En mi opinión, las religiones son solo una muestra del miedo humano a la muerte, y una representación de cómo se trata de escapar de ella. La idea de pensar que tras la muerte no hay nada es realmente triste y desoladora. Pero, ¿y si fuese así?¿Cuál sería el sentido de la vida entonces si estamos predestinados a morir sin más?¿Podríamos tomar esto como una motivación a aprovechar la vida al máximo? Nuestra existencia no es relevante para el curso del universo. Somos prescindibles, hemos de aceptarlo. Si al universo le quitas la humanidad, queda el universo. "Hagas lo que hagas en la vida será insignificante, pero es muy importante que lo hagas". Ghandi.

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